My new work "Poemas Sin Nombre” (2013) gets its world premiere by Ensemble TRIODUO (Holland) on April 27, 2014 at 15:00 at Werkgebouw Het Veem, Amsterdam.
SERIES “TOETS DES TIJDS”
Essential Arts Foundation.
Ensemble TrioDuo: Lara Diamand (soprano voice), Georgina Collington (piano), Erica van den Berg (flute)
About "Poemas sin nombre"
This work was specially written for Ensemble TrioDuo, thanks to the financial support of the Fonds Podiumkunsten. I have chosen three love poems by Cuban writer Dulce María Loynaz (1902-1997), which are published on a book after which this music piece is named. Loynaz is one of the greatest XX century Cuban poets, and her writing style and meaningful words have impressed me deeply. I tried to capture in music the essence of the implicit feelings on the texts, mainly related with frustration, deception, melancholy and solitude. According to my personal appreciation, Loynaz is able to express those feelings in the most simple but yet strongest way.
Sobre "Poemas sin nombre"
Este trabajo ha sido escrito especialmente para el ensemble TRIODUO, gracias al apoyo financiero del Fonds Podiumkunsten. He seleccionado tres poemas de amor de la poetiza cubana Dulce María Loynaz (1902-1997), los cuales aparecen publicados en un libro que lleva el mismo título de esta obra musical. Loynaz es una de las mas grandes escritoras cubanas del siglo XX, y su estilo y palabras llenas de significado me han impresionado profundamente. He tratado de captar en música la esencia de los sentimientos implícitos en los textos, mayormente relacionados con frustración, decepción, melancolía y soledad. De acuerdo a mi apreciación personal, Loynaz es capaz de expresar estos sentimientos de la manera mas simple y a la vez mas contundente.
POEMAS SIN NOMBRE, by Dulce María Loynaz.
XLIII
Tuve por tanto tiempo que alimentar la soledad con mi sangre, que tengo miedo ahora de encontrarme sin sangre entre tus brazos... O de encontrarte a ti menos en ellos que lo que te encontraba en mi ardorosa y viva soledad.
De tal modo te he fundido en ella y yo contigo, de tal modo le he ido traspasando anhelos, sueños gestos y señales, que tal vez nuestro encuentro sólo sea el de dos nubes en el cielo o dos desconocidos en la tierra.
XLVI
Ni con guirnaldas de rosas deseo sujetarte. No quiero nada tuyo que no brote por propio impulso, como el agua de los manantiales.
No he de poner un dedo sobre ti; me es grato recibirte como un don, no como un fruto de fatigas.
Si he de bajar hasta la entraña de tu tierra a buscar el diamante que he soñado, guarda el diamante tú, que no lo cambio por mis sueños.
De sueños resoñados pude vivir hasta ahora; de diamante ofrecido con desgano, yo no podría vivir un solo día.
XXXVII
Ayer me bañé en el río. El agua estaba fría y me llenaba el pelo de hilachas de limo y hojas secas.
El agua estaba fría; chocaba contra mi cuerpo y se rompía en dos corrientes trémolas y obscuras.
Y mientras todo el río iba pasando, yo pensaba qué agua podría lavarme en la carne y en el alma la quemadura de un beso que no me toca, de esta sed tuya que no me alcanza.